El pasado 9 de octubre solicitábamos a la Delegación de la Policía Local y al Jefe del Cuerpo José Madina Arteaga, una reunión para tratar varias situaciones que consideramos de inestabilidad laboral. Desde que se incorporó el Superintendente, uno de los objetivos que le marcaron los responsables políticos fue el conducir una negociación con la UGT para llegar a una definitiva clarificación de los puestos de trabajo, situación y negociación que al día de hoy no se ha visto consumada.
Venimos denunciando desde este Sindicato, la reestructuración que quiere llevar a cabo el Superintendente de la Policía.
Hoy las secciones sindicales de UGT y CCOO venimos a denunciar el mayor atropello laboral vivido desde la instauración de la democracia en el seno de la plantilla de la Policía Local.
El pasado día 26 finalizaron las reuniones que se han mantenido entre la Delegación de Protección Ciudadana y los representantes de los trabajadores en las que se abordaron las medidas a tomar para el próximo año en cuanto a la organización del personal de la Policía Local.
Nos ha sorprendido que el modelo policial que quiere imponer la Delegación sea totalmente contrario al ofertado a la ciudadania en los programas electorales con los que concurrieron a las pasadas elecciones de mayo el Partido Socialista e Izquierda Unida, así como totalmente contrario a las declaraciones vertidas por el Alcalde, resultando inaudito que los servicios nocturnos entre Domingo y Jueves sean cubiertos sólo con uno o dos patrulleros quedando desprotegida la ciudad.
Desde los sindicatos esperábamos que un Equipo de Gobierno conformado por fuerzas progresistas, una de ellas integrada en su totalidad por miembros procedentes del mundo sindical, tuvieran la sensibilidad en materia de negociación con los representantes sindicales para alcanzar acuerdos que contenten a ambas partes, sin tener que llegar y es el caso a la imposición de in modelo policial de forma unilateral por el Equipo de Gobierno.
El modelo que se pretende modifica las condiciones de trabajo de la totalidad de la plantilla, vulnerando derechos sociales, que a nuestro entender se encuentran consolidados a través del tiempo. Este modelo es diametralmente opuesto a las nuevas medidas promulgadas por el Gobierno de la Nación en materia de Conciliación de la vida laboral y la familiar, siendo la misma coalición de izquierdas la que gobierna en nuestra ciudad.
Desde ambas secciones sindicales solicitamos la intervención mediadora del Alcalde en el conflicto que venimos padeciendo.
Venimos denunciando desde este Sindicato, la reestructuración que quiere llevar a cabo el Superintendente de la Policía.
Hoy las secciones sindicales de UGT y CCOO venimos a denunciar el mayor atropello laboral vivido desde la instauración de la democracia en el seno de la plantilla de la Policía Local.
El pasado día 26 finalizaron las reuniones que se han mantenido entre la Delegación de Protección Ciudadana y los representantes de los trabajadores en las que se abordaron las medidas a tomar para el próximo año en cuanto a la organización del personal de la Policía Local.
Nos ha sorprendido que el modelo policial que quiere imponer la Delegación sea totalmente contrario al ofertado a la ciudadania en los programas electorales con los que concurrieron a las pasadas elecciones de mayo el Partido Socialista e Izquierda Unida, así como totalmente contrario a las declaraciones vertidas por el Alcalde, resultando inaudito que los servicios nocturnos entre Domingo y Jueves sean cubiertos sólo con uno o dos patrulleros quedando desprotegida la ciudad.
Desde los sindicatos esperábamos que un Equipo de Gobierno conformado por fuerzas progresistas, una de ellas integrada en su totalidad por miembros procedentes del mundo sindical, tuvieran la sensibilidad en materia de negociación con los representantes sindicales para alcanzar acuerdos que contenten a ambas partes, sin tener que llegar y es el caso a la imposición de in modelo policial de forma unilateral por el Equipo de Gobierno.
El modelo que se pretende modifica las condiciones de trabajo de la totalidad de la plantilla, vulnerando derechos sociales, que a nuestro entender se encuentran consolidados a través del tiempo. Este modelo es diametralmente opuesto a las nuevas medidas promulgadas por el Gobierno de la Nación en materia de Conciliación de la vida laboral y la familiar, siendo la misma coalición de izquierdas la que gobierna en nuestra ciudad.
Desde ambas secciones sindicales solicitamos la intervención mediadora del Alcalde en el conflicto que venimos padeciendo.
