Las confusas versiones sobre la
noticia que se viene publicando en distintos medios de comunicación en relación
a la imputación de tres técnicos municipales en la operación enredadera sólo
vienen a invitar a que por parte de
algunos se venga a empañar la imagen de los empleados públicos a través de
comentarios desafortunados, y como no, siempre hechos desde el anonimato.
L a imputación no es más que una
garantía procesal de la que goza quienes son parte necesaria y esencial en un proceso judicial, y por tanto en
calidad de sujetos procesales, son amparados con garantías como la defensa en juicio,
presunción de inocencia y otras.
A esta práctica puede estar sujeto cualquier empleado público
por el sólo hecho de ser lo que es, un
servidor público que realiza su trabajo en el área que corresponda.
Desde la Sección Sindical de la
Unión General de Trabajadores queremos dejar claro el respeto a la acción
judicial, sin hacer valoraciones y juicios de valor sobre el tema en litigio
que corresponde a los órganos judiciales, pero si queremos manifestar que los
tres compañeros son magníficos profesionales que en su dilatada carrera
profesional jamás han visto tachado su expediente personal, por lo que
esperamos que a la mayor brevedad posible se aclaren los hechos.