UGT exige la inhabilitación del alcalde de Los Barrios por la presunta apropiación indebida de las cuotas de afiliados y los ataques contra la libertad sindical

UGT exige la inhabilitación del alcalde de Los Barrios por la presunta apropiación indebida de las cuotas de afiliados y los ataques contra la libertad sindical.

A pesar de la denuncia por este motivo interpuesta en el Juzgado hace más de un año y medio, la misma situación no se ha subsanado y sigue repitiéndose en la actualidad.

La Unión General de Trabajadores en el Campo de Gibraltar quiere denunciar la situación de impago de las cuotas sindicales detraídas a los trabajadores municipales del Ayuntamiento de Los Barrios desde hace más de tres años. Un impago que supone un presunto delito de apropiación indebida por parte de la Corporación Municipal y sus gestores y que ya supera los 100.000 euros.

Hay que recordar que esta situación ya fue denunciada en el Juzgado de Instrucción número 4 de Algeciras hace más de un año y medio, denunciándose entonces la presunta apropiación indebida de más de 40.000 euros hasta esa fecha en referencia a las cuotas de 2008 a 2010. Situación que una vez denunciada en el Juzgado ha seguido repitiéndose en el tiempo hasta ahora, por todos los gestores locales que han pasado por el Ayuntamiento barreño, a excepción del alcalde Montedeoca quien sí abonó unos tres meses de las cuotas mensuales, no así el actual alcalde, Jorge Romero quien desde que tomara posesión de su cargo en junio aún no ha pagado ni un solo euro de las cuotas sindicales que cada trabajador afiliado aporta mensualmente a su sindicato de sus nóminas, incurriendo de nuevo en este presunto delito tipificado en el Código Penal en los artículos 249, 250 y 252. Sin embargo, el regidor local sí se permite el lujo de cerrar las empresas públicas municipales con ‘manu militari’ y sin un consenso con los agentes sociales. Despedir a las trabajadoras de la limpieza de colegios en el municipio y rescindir el contrato a los 28 trabajadores de la RTVLB y por último recortar a la mitad las horas sindicales de los representantes de los trabajadores argumentando que el Convenio Colectivo es ilegal. 

Dice el Código Penal en su artículo 252 que: “serán castigados con las penas, los que en perjuicio de otro se apropiaren o distrajeren dinero, efectos, valores, o cualquier otro mueble o activo patrimonial que hayan recibido en depósito, comisión o administración o por otro título que produzca la obligación de entregarlos o devolverlos … cuando la cuantía exceda de los 400 euros”. De declarar la justicia esta presunta apropiación las penas a las que se enfrentan los regidores locales es de uno a seis años de prisión y multa de seis a doce meses cuando cumpla estos supuestos: “Se perpetre abusando de firma de otro, o sustrayendo, ocultando o inutilizando en todo o parte algún proceso, expediente, protocolo o documento público u oficial de cualquier clase”.

Desde UGT afirmamos que cómo es posible que el señor Romero esté hablando de “aplicación mínima exigible de la ley” para solventar asuntos económicos, de una gestión transparente y eficaz de la administración local, de una auditoría externa o de reconstruir la maltrecha economía consistorial, y por otra parte interrumpe la gestión del sindicato en su conjunto en la comarca, sustrayendo supuestamente las cuotas que libremente los trabajadores aportan y que sirven para el desarrollo del trabajo diario del sindicato. Desde UGT entendemos que si esta situación no se corrige inmediatamente estamos en nuestro derecho de interrumpirle la gestión que realice de forma perversa contra los trabajadores del consistorio en un claro ataque unilateral contra el derecho laboral de los trabajadores. Tampoco entendemos como no ha empleado la misma rapidez para coartar los derechos sindicales de los trabajadores en abonar las cuotas sindicales de los mismos que no se han pagado.

Tradicionalmente las relaciones de UGT con el PA de las que él es miembro nunca han sido malas, excepto ahora que tenemos en Los Barrios un gestor zarramplín que ha llegado de forma prepotente a la alcaldía actuando irresponsablemente en algunas decisiones en su municipio y que demuestran su bisoñéz en la gestión.  Por todas estas cuestiones estimamos oportuno y necesario que se inhabilite de una vez a este nefasto alcalde. No obstante, desde la Unión General de Trabajadores y a pesar de todos los ataques que el sindicato ha recibido de la corporación municipal en estos meses, seguimos tendiéndole una mano para ofrecer soluciones y alternativas por el bien de los trabajadores municipales, y la ciudadanía en su conjunto.